Este verano es el momento perfecto para hacer el viaje de tu vida, aquel que estabas deseando desde hacía tiempo. Es el momento perfecto para dejar que el sol de España te tueste la piel y para vivir unas noches mágicas rodeado de tradición, arte, gastronomía y, por qué no, de playa.
Ya lo dice el dicho, que Sevilla no tiene playa. Y es verdad. Las playas de los sevillanos son todas aquellas que rodean a la provincia. La belleza de la arena fina de Huelva y su cercanía con la capital andaluza, convierten a Isla Cristina, Mazagón y Matalascañas en los destinos costeros más transitados.
La belleza de Cádiz, que recibe al mar en su hermosa playa de La Caleta, relaja a todo aquel que cena un sábado mirando al horizonte. Por eso, las altas temperaturas de Sevilla son fáciles de lidiar. Recordarás toda la vida el pescaíto frito de los chiringuitos mientras las olas llegan a la orilla y los paseos marítimos saboreando magníficos helados mientras descubres el encanto de los pueblos de la costa gaditana: Conil, Los Caños de Meca, El Palmar, etc.
Y si la playa la prefieres para los fines de semana, un lunes de verano también hay mucho que hacer en Sevilla. Una visita a las ruinas romanas de Itálica o a Carmona; divertirte en el parque de atracciones de Isla Mágica o en el Acuario de Sevilla; disfrutar de conciertos al aire libre en el Alcázar o rutas nocturnas por la ciudad, no son malas opciones. Se empieza comienzo salmorejo en el centro y se acaba paseando por la mágica ciudad cuando ha caído el sol. Y es, en ese momento, cuando Sevilla es única. Cuando las farolas iluminan la majestuosidad de toda sus calles.
Si a esto le sumas el hospedaje con Home at Homes, tus vacaciones serán las mejores de tu vida. No faltará detalle ni habrá un minuto en el que no sepas qué hacer. Porque la Giralda, el Real Alcázar, el Guadalquivir y las terrazas en la orilla de este río le dan vida a tu verano. Y, además, tienes tantas playas entre las que elegir, que tu estancia aquí va ser más duradera de lo que piensas…